Friday, November 17, 2017

Andar agachado, buscando el agujero. Andar rastrero contra los grandes vientos, eso para precaverse , para atemperarse de todo lo siniestro que puede atravesar el interior, pero buscar en la zona del precipicio, saber que detrás de todos los grandes abismos hay una mano que escribe, una sangre que devora y pulsa las palabras, que continua con un llanto de belleza, de como se anda en las veredas , de como se aprende a sentir con la gente, con la música, en la calle, en los colectivos nos subimos a la tarde de los otros en nuestra hermosa tarde.

Thursday, November 09, 2017

Tengo una forma de anudar el sentido de mi grito, de disponerme bipolar , para mi y para otros, a veces para ausentarme o intentar una vez mas el movimiento en el cuerpo que sea danza de mis imaginarios, danza de mis ensueños, para explicarme mejor del lado en donde crecen en mi los cardos, con esas espinas que duelen en pleno misterio, mi condición , mi enfermedad, de la que resulta mi lucha por levantarme, todas mis caídas, mis resistencias y por fin el encuentro con el movimiento que surge de esa parte solar mia, atravesada de paisajes, de llanuras, de mares, de cañadones, todas esas piezas sueltas de mi persona , que yo armo y desarmo como intentando una forma que sea escritura, que sea alborada, principio de una gestación, de un nombre que se teje a la mañana de una respiración, de un corte, de una lactancia en el mundo nutricio de un pecho lunar, como fue tenerte y abrazarte, también como fue perderte y recobrarte.
Pero detrás de su niñez donde había quedado el pecho, la mama en la tierra donante, en los jazmines del duelo, un lugar para dejar crecer el temor de la historia, a que te la contaran y que no pudieras entenderla, por llamarla siempre, a pesar de que la sentias muerta, pero había una manera de insistir, de pedir perdón, de someterse y domesticarse porque a lo mejor bailaba mejor o se quedaba mirando el techo, hecho un nudo en su tentativa de rescatarse, de envolverse en los terrones de azúcar, en la cal de las paredes, también muriendo el en el baile despojado de toda la psiquiatría, de las ordenes para rehacerse, cuando el se encontraba en ella, maniatado en una cama, con una cuchara sopera y un amanecer para dar a parir porque el también se sentía pariendo y a ella la habían escondido, detrás de los tejados, mientras sonaban las campanas y la envolvían muerta con toallas y el tambien se aburria bailando, porque se paria a si mismo bailando y se dejaba llevar y a veces era como un caballo mañoso por toda la domesticación de toda la psiquiatría en mama, con los electrodos, encerrada en su celda, alla en el cine de sus películas adolescentes, por siempre la locura como un idioma para bailar con la locura, para hacerla volar por los aires, en las hamacas como el pibe que se atraviesa en su llanto de no querer hacer lo que le dicen, si total para que, total esta danza para maniatarme mas o para liberarme, no lo se, simplemente la dejo ser y alguna parte de mi que se aburre, que se subleva por desatarse, por rezongar nomas, hasta que pudiera ser un acuerdo con otra cosa, una emancipación, no lo se.

Saturday, November 04, 2017

La llevaba adentro como una muñeca con vida, como una bolsa de maíz, como un pedazo de tierra, la sentía moverse, la sentia bailar y por momentos estaba atravesada en su cuerpo como un paisaje de viejas montañas, asi la vivía mientras iba pariéndola en su mente, la llevaba naciendo bajo un árbol, gritaba de tanto grito, con las piernas bien abiertas, a horcajadas la recibia, la abrazaba desnuda de sus desnudos, como atada de una rama se dejaba llorar de tanto llanto, de tanto parirla en el gran paisaje del fuego, de tanto quererla en el estallido de esa mañana con sangre y con luna, con su caricia y sus besos, la sintió palpitar en su recuerdo, en su corazón de niebla, le desato el cordon con los dientes como una perra, se entrego con la mirada puesta en sus ojos y asi la lamio, la curo le entrego sus brazos para el nuevo dia.

Friday, November 03, 2017

Y yo dejo que se distraiga, que se enrede el gran firulete del vecindario, dejo que brille, que amase su pan, que corra detrás del rio, desnudo como vino llegando el loco, con su locura a cuestas, con su verde amarillo soñar encuentros y verduras, con sus piolas y sus violines, el loco, amamantando su fulguración, su bestia política y privada, en todos los hospitales, con sus inflorescencias, semidormido como quien lleva en si un gran señuelo que atrae, que engancha en la pesca matrimonial, la locura de todos los ríos, de los montes de Parana , de las esquivas mostraciones del dolor de alambradas, de corazones que duelen en su dolor como la bestias, de la escritura de los miembros, de estar acostado mirando el sol con la oscuridad adentro como si se tratara de una llanura, de un desierto que se come con una boca llena de alambres.
con palabras me doy permiso para estar bien, en ese campo que se abre desde los hospitales, desde todos los encierros, lo que me humillaba, lo que me reprimia para mejor buscarme, pero en una busqueda incesante desde las infancias desprotegidas sentir la erosion, el termino de la carrera, la sublevación para entenderme mejor, quizás volver a esos parajes solitarios, a esos desiertos de la mente donde todo pesa tanto, los arboles del parque del hospital, los propios encierros donde se busca que se acomode como puedan los liquidos internos del cerebro, la química de la cabeza en los paisajes renovados como canciones, como poemas o acertijos de cielos inmensos que vienen a limpiar por dentro del cráneo todas las manifestaciones de la tristeza en los galopes por dentro de la carcaza núbil de la despiojada cabeza, de la milenaria cabeza como panorama de la gente que pasa y que todos vamos naciendo y todos nos vamos pariendo mas alla del hospital, en las calles, en los refugios.

Thursday, November 02, 2017

Buenos aires me devuelve lo que siempre le pedi, un semblante originario, como mis pies desnudos y atravesados, como mi cuerpo que danza el movimiento de los oleajes, de las centellas, de las miradas como cielos, las eternas miradas que suben a los balcones, a las ventanas , a los dormitorios de sus escondidos, de sus refugiados postres del invierno, del sol que canta amaneceres nuevos en la mansedumbre y también en los despojos y en el vecindario de los dichos con macetas y geranios y jazmines y malvones, de acordeones a piano, de sabores a humedad,a filigrana de grandes toallones y verdulerías y mostradores y tanto andar a través, tanta vacacion de arado, de amado, de vieja escritura, de mandolina para esperar en todos los rincones los nuevos autobuses, el estilo de su contoneo, de su bamboleo por la ciudad que se abre de piernas, que se aluniza , que se pone polleras, que se pinta en todos tus corazones.