Negra aparición de la muerte Un gran espejo un gran cadáver Miseria de la rosa desemplumada La rosa que hierve en los intestinos Hambre de la rosa perfumada En el dolor de los dólares Donde salta la locura en zonas de riego O enfermedad Que puede horadar tus manos Tus huesos de acumulación de dinero Trepando escaleras en la siesta Las mansiones eternas los lagos las vidrieras Soñando las infancias con sus muertos a cuestas Sobre la espalda la carga el duelo la penumbra el cielo Arrugada tu pena en un rincón Lloras la llanura exquisita del dolor Y en tu parto el llanto equivocado Las voces en cabalgata canastos de flores Murmullos esquizofrénicos en la picana de tu corazón Donde muerde el destino y silabea entre los charcos los pantanos que acumulan capital y cuentan noches de abedules Tiempo de inconformidad alas desplegadas En las comisuras de los labios perdón.

A veces palpitan los caballos En tu estomago palpitan como soles Y van a parir alas de amaneceres Y se quedan quietos como estampas por eso hay un universo del litio como mis noches estrelladas esta aguja de tejer es como de nieve bipolar sinceramente suelta su llanto y se deja ir por la ciudad como un vomito la cabalgadura que la locura aplaca en que música voy a morir de tempestades interiores en que encuentro volveré a nacer de un columpio de una madriguera entre tus piernas sangre y nacimiento sangre y deslumbramiento sangre entre tus piernas de no sangrarme al mundo lo suficiente.