Sunday, January 07, 2018

la invención del insomnio, juntando los pedazos de comida, entregándose por completo a este sentimiento de paz y de hambre, sin resolver nuestras propias cuentas, nos balanceamos entre las palabras como un tren en la montaña. Un tren lejano que se pierde en el recuerdo, cuando vuelve la adolescencia con su manera de andar desfalleciendo en el amor, con las ganas imposibles de querer, una manera de surgir en el gran viaje, en estas distancias maravillosas que atesora el corazón, una mañana para permitírselo todo, una forma de evadirse en el misterio, de nunca parar por las estaciones de trenes, por los ventanales del mundo, siempre con las ganas de partir, un poco muriendo en las noches solitarias, en ese reflujo de la soledad y las mareas y las lunas, junto con la domesticación de lo salvaje en una habitación, muchos años mas tarde, cuando suena una trompeta y escribo, sobre las líneas de mis manos esta casa del ensueño, estos libros que leo una y otra vez, en el insomnio que me sorprende, en la angustia de mi cabeza inquieta que no duerme por todos esos misterios, esas luchas de viejo recuerdos y trenes, en esos otros sueños de viajes como trompetas, como cornisas de mi vida, llorando solo el llorar de mi intemperie siempre marítima.

1 comment:

Tiempo ciclico said...

Excelente.
Te comparto mi blog nocturno
Tiempociclico.blogspot.com.ar
Decime que te parece